La guerra en Ucrania pone en jaque el suministro de uranio para las nucleares españolas

La gestión de los residuos radiactivos —que tiene unos costes milmillonarios y que en España ha abierto una guerra judicial de las compañías eléctricas contra el Estado— es uno de los hándicaps de la nuclear frente a las renovables. Pero también lo es el aprovisionamiento del combustible que emplean los reactores, porque el uranio procede en muchos casos de puntos calientes en la geopolítica internacional. Enusa, empresa pública, se encarga en España de garantizar el abastecimiento para las cinco centrales que hay en activo. Debido a la invasión rusa de Ucrania, su trabajo se está enfocando en la “búsqueda de otras fuentes alternativas para garantizar el suministro”, según admite la empresa en su última memoria anual, que acaba de publicar.