El chicle, la basura plástica que consumimos y tiramos a toneladas
Dice una leyenda urbana que un chicle tragado permanece durante siete años en el estómago. Es solo un bulo: el chicle transita por el tubo digestivo junto con los alimentos y se expulsa a su debido tiempo. Eso sí, entero, porque sí es cierto que su base de goma es tan indigerible como un neumático del mismo material.